Desde la psicoterapia, la terapia sexual busca mejorar aspectos de la salud sexual de personas y parejas que encuentran dificultades en algún área o que necesitan un impulso para su desarrollo. Se dedica a una realidad rodeada de mucho tabú.
El órgano sexual más importante es el cerebro, ya que es este el que carga con el erotismo, con la orientación, con la identidad, con los instintos, las hormonas… Por eso, en muchas ocasiones, hay una causa psicológica responsable del origen o mantenimiento de un problema que, desde el desconocimiento, podemos asociar solo a una causa física o fisiológica.
El ámbito de la sexología es extenso, por lo que las problemáticas que puede abordar un sexólogo también lo son.
Desde disfunciones y parafilias sexuales, hasta temas de orientación sexual e identidad de género, reproducción, educación sexual, trauma de abusos o violencia de género, pueden encuadrarse en este tipo de intervención.
Cualquiera de estas problemáticas puede requerir la intervención o acompañamientos psicológicos, y sobre todo de profesionales habilitados y especializados en el área.
No hay problema. Las disfunciones sexuales se pueden trabajar desde la psicoterapia individual, para casos en los que la problemática se quiere trabajar en privacidad o, como ya mencionamos, cuando no hay una pareja sexual con la que trabajarlo en el presente.
La psicoterapia de pareja para el tratamiento sexual se planteará en casos en los que sea necesario por criterio del profesional o así lo deseen ambos miembros de la pareja.
Primer contacto telefónico o mediante WhatsApp.
Informa motivo consulta y disponibilidad
Primera sesión.
Conoces a tu psicóloga. A tu ritmo, respetando tu proceso en todo momento.
Evaluación.
Sesiones de evaluación para conocer la problemática y establecer objetivos de terapia
Devolución de info.
Ponemos en común el análisis del problema a tratar.
Tratamiento.
Empezamos con las sesiones para llegar a los objetivos que estamos buscando
Sesiones de seguimiento.
Vamos espaciando las sesiones según el proceso avanza y hay una mejoría.
Primer contacto telefónico o mediante WhatsApp.
Informa motivo consulta y disponibilidad
Primera sesión.
Conoces a tu psicóloga. A tu ritmo, respetando tu proceso en todo momento.
Evaluación.
Sesiones de evaluación para conocer la problemática y establecer objetivos de terapia
Devolución de info.
Ponemos en común el análisis del problema a tratar.
Tratamiento.
Empezamos con las sesiones para llegar a los objetivos que estamos buscando
Sesiones de seguimiento.
Vamos espaciando las sesiones según el proceso avanza y hay una mejoría.
C/Miguel de Cervantes, 9, local 3, Colmenar Viejo, 28770
Centro sanitario habilitado por la Comunidad de Madrid
C/Miguel de Cervantes, 9, local 3, Colmenar Viejo, 28770
Centro sanitario habilitado por la Comunidad de Madrid
Reconocemos que es difícil dar el paso y decidir venir a un psicólogo, por eso entendemos las dudas.
Cuando hay un malestar, del tipo que sea (somático, físico, emocional…), ya es un indicador de que puedes necesitar ayuda psicológica.
Escucha tu cuerpo. Date esa prioridad.
Ante la duda, contáctanos y mediante la llamada gratuita de 15 minutos podremos valorar si lo necesitas.
Las sesiones de psicoterapia tienen una duración aproximada de 50 minutos. Un proceso completo es difícil de valorar. La mayoría de procesos pueden durar entre 6 meses y 1 año, pero hay personas que con menos tiempo encuentran una mejoría.
Dependerá de la problemática por la que se acuda.
No pasa nada. La recomendación de las sesiones, sobre todo al principio, son semanales. Esto permite que el proceso de mejora sea algo más rápido, ya que crearemos un vínculo que nos permitirá empezar a trabajar antes. Pero nos adaptamos a las necesidades económicas y de tiempo de cada persona, por lo que no es un problema.
Se pueden anular, pero siempre será necesario avisar con 24 horas de antelación. De lo contrario, se tendrá que abonar el importe o, en caso de bono, se restará del mismo.
Para eso ofrecemos una llamada inicial de 15 minutos en la que podremos valorar tu motivo de consulta y si se adapta a lo que en el centro trabajamos. Así mismo, la primera sesión tiene un coste reducido para que podamos darte la información necesaria al respecto: si lo mejor es derivarte a otro servicio, si necesitamos la colaboración de otras disciplinas, etc.
Porque entendemos, al tratarse de personas, que para generar un vínculo necesitamos conocernos. Hay veces que no «encajamos» con el profesional que nos ha tocado, y es lícito. Por eso permitimos que la primera consulta sea de conocernos y ambos valorar si hacer el proceso juntos.